BUENOS AIRES.- El Gobierno nacional no está realizando pagos a tenedores de bonos que aceptaron cobrar en el país, tras el bloqueo impuesto por el juez de Estados Unidos, Thomas Griesa, al pago de títulos reestructurados. Según la Asociación de Damnificados por la Pesificación y el Default (Adapd), Nación Fideicomisos, que es la entidad designada para pagar la deuda reestructurada, no ha realizado desembolsos a los ahorristas que aceptaron cobrar en la Argentina.
“Tenemos bonistas asociados que entraron a las reestructuraciones y que no han podido cobrar sus rentas, no quedó claro por qué”, dijo Horacio Vázquez, directivo de Adapd.
“El Banco Nación tiene actividad en Estados Unidos, entonces ¿qué sucede si paga y elude la orden del juez? Podría ser pasible de alguna sanción”, agregó Vázquez, refiriéndose al banco del que depende Nación Fideicomisos.
Nación Fideicomisos no respondió reiterados llamados y correos electrónicos de la agencia Reuters solicitando información sobre los pagos. Funcionarios del Ministerio de Economía rechazaron hacer comentarios al respecto.
Argentina cayó técnicamente en un incumplimiento de deuda a fin de julio pasado, después de que se negó a acatar la orden del juez de distrito de Manhattan para pagar U$S 1.330 millones más intereses a los fondos que no se acogieron a la reestructuración posterior al default de 2002, conocidos como holdouts.
A partir del fallo, Griesa impidió algunos pagos de deuda reestructurada, lo que llevó al país a aprobar en septiembre una ley para canjear bonos externos por otros con domicilio local. La movida fue considerada “ilegal” por el magistrado norteamericano y declaró a la Argentina en desacato .
El argumento que esgrimía el Gobierno para no cumplir con el fallo de Griesa era que la cláusula contractual RUFO (“Rights Upon Future Offers”) le impedía mejorar la oferta a los acreedores que no aceptaron los canjes de 2005 y 2010. Pero la cláusula venció a fines de 2014 y Argentina no ha dado muestras de querer negociar con los holdouts el pago de la deuda.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, reiteró en una entrevista con Radio del Plata de Buenos Aires que no se va a pagar la sentencia y que sigue en pie la opción de canje de deuda para que los acreedores acepten la misma oferta de las reestructuraciones.
“No se puede (pagar lo que piden), no se puede hipotecar graciosamente al país”, dijo Kicillof. “No se va a hacer de nuevo, por lo menos no con este Gobierno”, agregó.
Según Guillermo Nielsen, ex secretario de Finanzas que llevó adelante el canje en 2005, el nuevo gobierno que asuma en diciembre deberá resolver el conflicto con los acreedores de deuda impaga, con el fin de atraer las inversiones y el capital que el país necesita para obras de infraestructura. (Reuters)